"María Bartola después de Diego Velásquez"
39" x 35,5"
Óleo/Tela
1979
En esta obra de 1979, el maestro José Cestero, ocupa el espacio con una figuración humana central de primer y único plano, donde la representación se hace con un juego de formas que componen la totalidad del cuerpo. Un espacio rectangular se divide del traje por una línea ocre en dirección ovalada, que confunde la mirada y la percepción, para buscar dentro de la tela la postura de María Bartola.
Todo indica si miramos en transparencia que está sentada en posición solemne .Aquí el artista fusiona el mismo manejo del color en el vestido del sujeto femenino, haciendo que busquemos a través de los matices de las sombras los límites del traje y del sofá , pues llevan la misma técnica de una materia pictórica con la penetración de pinceladas y sutiles brochetadas de óleo de un color dramático, dónde de nuevo se extienden todos los matices de la oscuridad para lograr la mística del cuerpo y del objeto.
Ambientación, compartida con una complicidad hacia Bacon, hasta lograr que se encienda la esencia misma de Bartola resaltada por el color tierra, arcilla y barro de su ancestralidad.
Supuesta hechicera, mística, del encuentro del cristianismo con las creencias indígenas, el maestro José Cestero, la invita en su vestimenta y pose a ennoblecerse en la Corte española, con ese aire de Infanta sostenido por la postura aristócrata del cuello y el detalle minimalista de sus perlas. Detrás del rostro, otra ocurrencia geométrica de una peineta , o de un baúl colonial, el todo dando el efecto del peinado real.
El duende, la identidad poética de Cestero, están en el detalle que viene a realzar el discurso visual en una poética sobresaliente del corazón como adorno del alma, y el rosado de unos labios que se refieren a la feminidad.
Con tres contrastes de colores frontales y los efectos de la materia pictórica soterrada, Cestero saca su duende para hacer María Bartola una imagen que viene a completar la galería universal de los sujetos que habitaron toda la obra de Velázquez.
Obra exhibiéndose en la "Colección permanente"